Darwin, Edison, Marie y Sally les dan un susto a los Nadurines
¡Hola amigos y amigas! ¿Qué tal va ese verano? ¿Ya habéis disfrutado de las vacaciones en familia o eres de los que estáis haciendo los preparativos para salir en el mes de agosto? ¡Qué vacías se sienten las calles en esta época del año! Nosotros los Nadurines queremos tomarnos un descanso y vamos a viajar a Nadur para ver a nuestras familias. ¡Hace mucho tiempo que no vamos de visita a contarles cómo va nuestra misión!
La organización es lo más importante
¡Ay! Qué difícil puede llegar a ser preparar una maleta. Meter algo de ropa es lo más sencillo porque hasta el día en que salimos podemos ponernos otra, pero, ¿y qué hay de las cosas que tenemos que seguir utilizando mientras? Como el peine, el cepillo de dientes, los juguetes… ¡Los juguetes! ¡Cuáles nos vamos a llevar! ¿A vosotros también os pasa?
Dicen que menos es más y como nosotros siempre apostamos por hacer uso de la creatividad para inventarnos juegos, hemos decidido que solo nos llevaremos lo que sabemos que vamos a utilizar. Por ejemplo, los cubos y las palas, una pelota y nuestro juego favorito. Cuando lleguemos a nuestro destino, estamos seguros de que encontraremos múltiples distracciones a nuestro alrededor.
¡Pero no solo tenemos que preparar nuestras cosas!, los Toris también llevan su maleta. Una pequeña piscina para que Marie siempre tenga agua, el bolso de Edison con todas sus herramientas, algunos libros para que Sally nunca deje de aprender y algunas zanahorias para que Darwin se entretenga. ¡Qué ilusión viajar a casa!
Todo listo para partir
Nos ha costado un poco, ya que no sabemos dónde se han metido nuestros Toris y no podíamos encontrar sus cosas, ¡pero ya tenemos todo listo para irnos! ¡Chicos, chicas! ¿Dónde estáis? ¡Es hora de irnos!
- Nil, ¿has visto a Marie?
- No, estaba por aquí hace un rato, pero de repente ha desaparecido. ¡No la encuentro por ninguna parte!
- ¿Y tú, Petra? ¿Sabes algo de Edison?
- Tampoco, me ha dicho que ahora venía pero ha pasado un buen rato…
- ¡Oh, no! Pero es hora de irnos… Malik, ¿y tu? Malik… ¡Malik, despierta! ¡Siempre durmiendo! ¿Has visto a Sally? (Malik miró a Neala confundido…). Pues yo tampoco he visto a Darwin, ¡tenemos que hacer algo! ¿Qué tal si nos separamos y cada uno mira por un rincón?
Y así fueron juntos, pero separados, a buscar a cada uno de sus Toris. ¡Sallyyyyyy! ¡Daaaaaarwin! ¡Eeeeedison! ¡Maaaarie!
- Nada, ¡no responde ninguno! Ehhh…, espera, ¡¿qué es aquello que se mueve allí en el jardín?! ¿Lo ves Petra?
- Mmm, no, no veo nada. ¿Dónde?
- Allí, ¡entre las flores!, donde las hortensias verdes azuladas, ¿no es ese Edison?
- ¡Sí! Parece que está descansando. Y allí, ¡mira!, en las margaritas, allí está Sally camuflada. ¡Vamos allí!
- ¿Pero qué hacéis aquí?, dijo Neala. ¿No sabéis que es hora de irnos?
- Sí, -dijo Marie sacando la cabeza de un charco de agua. Hemos venido a la naturaleza porque este también es nuestro hogar, y queríamos volver a casa con algo positivo que contar, no solo los problemas que tenemos hoy en día en el medio ambiente.
- ¡Claro!, -dijo Darwin, abriendo sus ojos desde un agujero hecho en la tierra. ¡El contacto con la naturaleza ya son vacaciones para nosotros! ¡No hay mejor lugar para estar!
- Lo entendemos, pero nos habéis dado un gran susto; ¡pensábamos que tendríamos que cancelar nuestro viaje! Así que venga, coged lo que os falte que es hora de irnos.