La importancia del juego en la vida de las personas (niños y adultos)
Aunque no lo parezca, seguramente te sorprenderá saber que el juego es una actividad que, aunque puede ser social o no, es muy relevante para la diversión de los niños y niñas así como esencial para que crezcan y desarrollen diversas habilidades básicas para aprender, comunicarse sanamente y comprender lo que sucede en su entorno.
Pero…¿qué hay en los adultos y adultas? Pues pese a la creencia popular, el juego puede ser una gran ayuda para mejorar varios aspectos de la vida y en algunas circunstancias, esta actividad puede ser hasta terapéutica. Te invitamos a quedarte y seguir leyendo para conocer los beneficios que tiene el juego en las distintas etapas de la vida. Como veremos, el juego no es sólo un asunto infantil, sino una actividad divertida para todas las edades.
En la infancia, por supuesto, el juego cobra un carácter vital para los niños. Cada juego tradicional se traduce en divertidas (¡e importantes!) actividades que desarrollarán las bases de la socialización y la comunicación, desde el respeto, la empatía a inculcar normas de higiene. Las investigaciones son claras en que, incluso, los juegos ayudan a mejorar el habla, disminuyen el estrés y potencian el estado óptimo para retener y comprender más información, lo que se traduce en un mejor desempeño escolar.
Relevancia del juego durante la infancia
¿Y quién habla de tantos beneficios, que por cierto, se han ido perdiendo? Por ejemplo, en un reciente estudio de la Academia Americana de Pediatría (AAP) se evidencia que los beneficios del juego en áreas tan distintas como la autorregulación y las conductas prosociales se están subestimando en la sociedad actual.
El auge de las pantallas móviles, las horas extra de trabajo de los padres y madres, y la actual pandemia por COVID-19 ha derivado en que los pediatras tengan que llegar a “recetar al menos 2 horas al día para jugar”.
Los niños de la década pasada en adelante pueden pasar de media hasta 4 horas de exposición a las pantallas (tablet, televisor, etc.) lo que conlleva un desarrollo general por debajo del umbral ideal en la infancia. Frente a esta problemática también se ofrecen soluciones prácticas tales como inscribir a los peques en un programas extraescolares que tengan modalidades de aprendizaje basada en el juego.
Jugar es tan importante que influye en la construcción de todo lo que podrá ser el niño o niña cuando llegue a la adultez.
La Academia Americana de Pediatría (AAP) hace hincapié en el juego como método para asumir riesgos y experimentar su ambiente. En resumen, jugar directa e indirectamente ayuda a:
- Resolución de problemas
- Mejoras a nivel molecular (epigenético)
- Conectividad neuronal y funcionamiento ejecutivo
- Autorregulación de las emociones
¡Y mucho más!
Por esto el recreo también se vuelve importante para los niños y las niñas. Es más, la AAP ha observado que los países con recreos de mayor duración también tienen un porcentaje más alto de buen rendimiento escolar.
Tipo de juegos que estimulan a niños y adultos
En el contexto de los juegos tradicionales, los padres, pediatras y docentes tienen un papel de guía sutil para los niños y niñas. Los juegos también propician que los adultos liberen estrés, se pongan en el papel de los más peques del hogar y recuerden detalles de su propia infancia, logrando que la experiencia sea satisfactoria para ambas partes y beneficiando los vínculos sociales.
Ofrecer a los más peques distintas modalidades de juego tradicional físico, al aire libre y con amigos de diferentes edades asegura que crezcan sanamente y se conviertan en adultos felices. Compartir estas experiencias indica a los niños y niñas que:
- Les queremos y les consideramos importante.
- Les enseñamos un lenguaje básico de amor y cariño.
- Entenderán, por primera vez, la importancia de validar emociones, comprenderlas y regularlas.
- Ayudará a su desarrollo motriz y corporal
Y como hemos dicho antes en Sorpresas Divertidas, mientras más sencillo, corriente y barato sea el juego, ¡mejor puede ser! ¿Entonces qué proponemos? Para los más peques basta bailar, imitar sonidos de animales e incluir unas muñecas, como por ejemplo nuestro Mi primer Antonio Juan, o accesorios a temprana edad.
Los juegos son una conducta clave en la evolución de todas las especies, como se puede apreciar hasta en nuestros peludos como gatos, perros, conejos etc. que juegan a cualquier edad. En los seres humanos esto no tiene que ser distinto, ya que aunque parezca una actividad realizada por el simple placer de hacerla, tiene beneficios para los adultos. A continuación de detallamos algunos de ellos:
- Los juegos entre adultos ayudan a liberar tensión acumulada en independencia de su sintomatología detrás, como la ansiedad, el estrés o la tristeza. Ante la espontaneidad del juego la mente técnicamente se libera, nos desconecta de la cotidianidad.
- Aumenta la creatividad y la autoestima, nos hace sentirnos mejor.
- Promueve la resolución de problemas y mantiene la mente y cuerpo en forma.
Incluso los juegos más aceptados entre adultos, como las cartas, el ajedrez y los videojuegos, confieren mecanismos de distracción tan necesarios para las personas como podría ser una alimentación sana. Por extensión, también se le considera actividades lúdicas al deporte.
Cómo volver a jugar en la adultez
Volver a jugar puede ser difícil si hemos vivido pensando durante mucho tiempo que el juego es sólo cosa de niños, y por tanto, divertirse así se traduce a ser menos adulto.
Además, la narrativa constante procedente de la Industrialización nos ha vendido el concepto de tener que producir todo el tiempo, ya que tiempo sin producir es tiempo perdido. Este tiempo "perdido" es valioso para todas personas, e incluso se sabe que para las personas mayores y de tercera edad conforma un elemento primordial para mantener una salud adecuada. ¿Y por qué sería tan importante comprender esto?
Por el motivo que el juego mantiene la mente joven gracias a la participación de la deducción, la imaginación y la creatividad; se reconstruye el pasado (se fortalece la memoria) e incluso permite que los mayores naturalicen y expresen sus mayores miedos de una forma amena. Así que no tengas miedo o vergüenza, ¡jugar es para todas las edades!
Sea como sea, existen terapias como la risoterapia o la bailoterapia que colaboran para que hombres y mujeres dejen fluir su niño interior. De por sí, se pueden usar los juegos como una herramienta más para evitar y disminuir problemas de depresión u otros trastornos mentales, así como hacer del tratamiento de estas condiciones algo más completo, rápido y personalizado.
En Sorpresas Divertidas ya hemos comprendido que, aunque el mayor público de nuestras muñecas sean niñas, es completamente sano que los niños y el resto de adultos compren muñecas, las coleccionen y jueguen con ellas.