Uno de nuestros mayores retos en esta gran misión que tenemos de cuidar al planeta es la de ser responsables pase lo que pase. Aunque lleguen imprevistos, no podemos olvidarnos del medio ambiente, ya que si este se daña, todo lo demás deja de ser posible. Hoy queremos hablarte de un término que quizás hayas escuchado alguna vez: la energía renovable. ¿Te suena?
Qué es la energía renovable
¡Vaya, vaya! Con tanto tiempo que hemos pasado en casa ya nos habíamos olvidado de cuánto nos queda aún por aprender sobre el medio ambiente. Sin embargo, como la actividad humana nunca para del todo, el impacto que este causa sobre el planeta continúa avanzando. Así que hemos querido retomar nuestras acciones para continuar con nuestro camino.
Desde hace ya algunos años, quienes buscan, como nosotros, la protección del planeta y de sus recursos, han propuesto nuestras formas de energía que nos permitan hacer nuestra vida tal y como lo hacemos ahora pero de una manera mucho más respetuosa. Es el caso de la energía renovable.
Hablar de energía renovable significa utilizar una fuente natural en el planeta que existe en abundancia o bien que puede regenerarse con facilidad sin que se cause ningún daño durante el proceso. Si piensas en todo lo que utilizamos en nuestro día a día, como la calefacción o el aire acondicionado, la gasolina para el coche o la moto, los aparatos electrónicos que enchufamos, la fabricación de millones de productos o incluso nuestro enemigo número uno, el plástico, todos ellos hacen uso de petróleo, gas o carbón de diferentes formas.
Son los llamados combustibles fósiles, y su extracción produce un daño muy grande a la Tierra. Pero no solo eso, sino que además necesitan millones de años para regenerarse, así que son una fuente de recursos limitada. Como alternativa, el propio planeta nos ofrece otros ilimitados, como son el viento, la luz del sol, el movimiento del agua o la biomasa; materia orgánica procedente de animales o plantas que puede usarse para obtener energía. Además, no producen emisiones tóxicas como los anteriores.
Cómo se utiliza la energía renovable
Quizás te preguntes por qué si es posible utilizar la energía renovable, seguimos haciendo uso del petróleo o el carbón en nuestro día a día con el daño que ocasiona en nuestra amiga la Tierra. La respuesta es muy sencilla: porque su eficiencia es menor y no se le dedica toda la atención que necesita para poder mejorar su rendimiento.
Pero, ¿cómo podríamos utilizar esta energía renovable? En primer lugar, la que utiliza la fuerza del viento se llama eólica y son esas torres blancas muy altas con un aspa. La solar, fotovoltaica o termoeléctrica, es la que utiliza los rayos solares para obtener energía. Muchas casas tienen ya estos paneles en sus tejados y pueden usarse para calentar el agua o activar la calefacción.
La energía hidráulica es la que aprovecha el movimiento de las mareas y las corrientes de agua. Y por último, la biomasa, son restos de la propia naturaleza, como por ejemplo cáscaras de nueces, huesos de aceituna o pellets, que pueden reutilizarse como combustible para la calefacción.
Como ves, el planeta es lo suficientemente inteligente como para permitirnos aprovechar la energía sin hacerle daño. ¿Utilizáis algún tipo de energía renovable en casa? Si la respuesta es no, ¡esta es una gran oportunidad para considerarlo!