¿Habéis notado como poco a poco los días empiezan a ser más largos y oscurece un poco más tarde? ¡Es porque está comenzado el fin del invierno! Eso significa que aunque todavía nos queden semanas de frío, quizás no vuelva a nevar como ha sucedido en las últimas semanas. ¡Así que hemos aprovechado para tirarnos por el trineo con el Sr. Muñeco de Nieve antes de que se descongele!
Un trineo para nuestro amigo
Los Nadurines siempre apostamos por la creatividad y la imaginación en todo lo que hacemos. ¡Es mucho más divertido que limitarnos a aceptar lo que vemos a nuestro alrededor! Además, siempre resulta útil para buscar soluciones.
¡Y esta vez nos ha hecho mucha falta! Solo tenemos un trineo y ya somos demasiados para subirnos todos en él. ¡Entonces no habría sitio para el Sr. Muñeco de Nieve! Y si alguna vez habéis estado con la nieve, sabréis que si la apretáis mucho, termina por deshacerse. ¡No queremos eso para nuestro amigo…!
Si os preguntáis de dónde hemos sacado el nuestro, fue un regalo que nos ganamos cuando ayudamos a Papá Noel a llegar a la Nochebuena. Como tienen que cargar muchos regalos, es lo suficientemente grande para que quepamos nosotros. Pero para que el Sr. Muñeco de Nieve vaya cómodo, necesitamos fabricarle el suyo propio.
Nosotros hemos utilizado un trozo de palet, de esos que suele haber por fuera de los supermercados. Si vosotros queréis uno, podéis usarlos también o las tablas de bodyboards que se usan para coger olas. ¡Pero cuidado por su superficie lisa resbala mucho!
El paseo con el Sr. Muñeco de Nieve
Con todo listo para el descenso, nos hemos dejado caer por una de las pistas más largas. ¡Nos encanta disfrutar de la naturaleza cuando está cubierta por una capa blanca! Aunque en invierno, la vegetación escasea un poco. ¡El Sr. Muñeco de Nieve nos ha contado el porqué! Resulta que cuando hace frío, los árboles pierden sus hojas para poder centrarse en mantener calentito al tronco, las ramas y las raíces. Se le llama época de letargo, y es que mantener tantas hojas requiere demasiado esfuerzo.
¡Pero eso no es todo! ¿Sabéis que de noche las plantas también se acuestan a dormir? Parece que las plantas bajan un poco sus ramas para descansar, y así cuando vuelva a salir el sol, tener la fuerza suficiente para volver a lucir bien firmes. Sin embargo, en las ciudades, debido a la luz de las farolas, este ciclo se dificulta y nuestras amigas las plantas no descansan tanto como deberían.
- ¡Oh!, ¡qué es esto! Parece una zona de baches, - dijo Neala.
- ¡Sí!, es como las turbulencias en un avión, - respondió Nil. ¡Son piedras!
- ¡Y ahí viene una muy grande! Deprisa, tenemos girar para no chocar, ¡todos a un lado!
Y así es como hemos terminado comiendo un poco de nieve y con algún chichón en la cabeza. ¡Es lo que sucede cuando empieza a descongelarse!
- ¡Nadurines! ¿Y qué hay del Sr. Muñeco de Nieve?
Pues os podéis imaginar lo que ha sucedido… Con el choque y como es blandito, no ha superado la caída. Al fin y al cabo, ¡estaba hecho de nieve! Su tiempo ha sido corto, ¡pero hemos aprendido mucho con él! Y eso intentamos nosotros con estas historias, que aunque sean cortas, ¡vosotros también podáis aprender! ¡Hasta la próxima!