Los Nadurines descubren la felicidad en las pequeñas cosas de la vida
Dicen por ahí que las mejores cosas de la vida son gratis, y si te paras a pensar, realmente es así. Los objetos materiales pueden entretenernos y ayudarnos a pasar un buen rato, pero a lo que realmente nos hace felices, no es posible ponerle un precio. El 20 de marzo es el Día Mundial de la Felicidad, así que aprovechamos esta oportunidad para reflexionar un poco sobre nuestras costumbres.
La felicidad en las pequeñas cosas de la vida
Ya llevamos un tiempo con nuestra misión de crear conciencia entre los humanos para poder salvar al planeta Tierra. Y a veces, aunque sea un pensamiento que suelen tener los adultos, nos viene a la cabeza eso de “seremos felices cuando lo hayamos logrado” o “por fin podremos descansar cuando todo haya acabado”.
Sin embargo, nos hemos dado cuenta de que, en realidad, ¡ya somos felices! La felicidad no es un estado permanente, porque no hay ningún estado permanente. ¿O acaso no hay días en los que los animales y las plantas parecen sonreír más y florecer, mientras que en otros parecen más decaídos y mustios?
Para los humanos y los Nadurines, la felicidad es exactamente igual. A veces nos sentimos tristes por el daño que sufre el medio ambiente y las especies que en él habitan; otros días sentimos rabia e impotencia porque nos esforzamos y no siempre parecemos obtener resultados. Pero a pesar de todo ello, seguimos estando contentos y con la ilusión de descubrir cosas nuevas cada día.
¿Y por qué? Pues porque la manera en que nos sentimos no puede depender de si alcanzamos nuestros objetivos o no. Ni tampoco podemos centrar toda nuestra atención en lo que sucede ahí fuera. Y eso es lo que quiere transmitir el Día Mundial de la Felicidad. En que sentirse a gusto con uno o una misma en el día a día solo depende de nosotros.
Dónde podemos encontrar la felicidad
¿Te ha pasado que estás en el cole triste por algún motivo y aparece tu mejor amigo para hacerte reír y de repente es como si hubieras olvidado todo? ¿O enfadarte en casa y que mamá te dé un abrazo y te diga que entiende cómo te sientes en lugar de regañarte? ¡Esa es la felicidad!
Nosotros, los Nadurines, con tanto observar al planeta, hemos descubierto otras pequeñas cosas de la vida que también nos ayudan a sentirnos felices. Y aprovechamos el Día Mundial de la Felicidad para contártelas.
¿Te levantas pronto por las mañanas para ir al cole? Aprovecha y asómate a la ventana y mira cómo sale el sol. ¡Los colores son fascinantes! ¿Hay un gato callejero que merodea siempre por tu casa? Hazle sentir que a alguien le importa y dale algo de comer. ¡Aunque no pueda hablar te lo agradecerá mucho! ¿Algún amigo o familiar está triste? Siéntate a su lado y hazle compañía sin decir nada. ¡Llenarás su corazón de amor! ¿Y las flores? ¿Te has parado a oler su perfume alguna vez?
La felicidad reside en hacer pequeñas cosas que nos hagan sentir bien. No importa si se trata de los ejemplos que te hemos dado o de otras cosas más simples como bailar, dibujar, pasar tiempo con nuestra familia o contar las estrellas del cielo.
En este Día Mundial de la Felicidad recuerda que pase lo que pase ahí fuera, siempre tendremos a todo aquello que nos hace sentir bien a nuestro alcance. Ponlo en práctica un rato cada día y verás que los momentos malos se vuelven menos importantes.
